En las Islas Canarias, el agua es uno de los recursos cuya protección, buen uso y compromiso por el reparto justo es esencial. Cuando de la importancia del agua para la agricultura se trata, es necesario el enfoque en la responsabilidad del ahorro y la gestión del recurso.

En Canarias no se cuenta con grandes reservas de agua como en otros territorios. Debido a esta limitación, a menudo es difícil cubrir las demandas, que superan por mucho la disponibilidad.

De allí radica la importancia de la adecuada administración de los recursos naturales, especialmente las aguas utilizadas para los cultivos.

El agua, un recurso indispensable

Las principales fuentes de recursos hídricos en Canarias son las aguas subterráneas, así como las aguas de producción industrial. Estas últimas corresponden a las desaladoras y depuradoras.

Las fuertes sequías que han azotado a las Islas Canarias han provocado la sobreexplotación de los acuíferos a los largo de los años, llegando incluso a limitar su tiempo de vida útil.

Entre los daños de la sobre explotación de los recursos hídricos se identifican:

  • Abandono de pozos.

  • Desabastecimiento de las áreas de riego.

  • Incrementos de los precios del agua.

  • Erosión del suelo y deterioro del paisaje.

  • Disminución de la capacidad de producción del sector primario.

  • Agotamiento prácticamente irreversible de las reservas acumuladas durante largos períodos.

  • Contaminación de los acuíferos costeros por intrusión marina.

Esto impulsó la innovación en técnicas de desalación del agua de mar. Hoy en día, el agua industrial es de gran importancia en las Islas Canarias, siendo la principal forma de obtener agua dulce para la agricultura.

La producción de agua industrial conlleva un incremento de la demanda energética, lo cual representa un coste extra para la producción agrícola, por lo que es necesario evaluar las posibles estrategias para optimizar la utilización del agua.

El riego agrícola: el principal consumidor de agua

El riego de los cultivos aporta muchos beneficios, como aumento de la producción agrícola, con todo el impulso económico para la población vinculada directa o indirectamente a las actividades creadas por la producción agrícola de riego.

A pesar de ello, el riego agrícola utiliza dos tercios de los recursos hídricos totales consumidos en el mundo por año. Lamentablemente, su uso está mal administrado, es ineficaz y esta altamente subvencionado.

Se reconoce que la agricultura es tanto un usuario principal como una fuente importante de contaminación de las aguas dulces.

Las aguas utilizadas para riego se contaminan el transportar sedimentos y residuos del proceso de fertilización y de la erosión de los suelos.

El uso de plaguicidas frecuente en áreas cultivadas intensamente, también contribuye de forma importante a la contaminación de las aguas.

Pese a todo esto, la agricultura es indispensable para el sustento de la humanidad, por lo tanto no queda otra opción que proponer e implementar mecanismos que permitan el uso eficaz del agua.

¿Cómo optimizar la utilización del agua en la agricultura?

En este punto es indiscutible la necesidad de incrementar la productividad del agua agrícola para lograr disminuir la presión sobre los recursos hídricos, reducir la degradación ambiental y mantener o mejorar la seguridad alimentaria.

Entre las distintas estrategias que contribuyen al aumento de la efectividad del uso del agua en la agricultura está el aumentar la capacidad de riego superficial, mediante la conversión hacia cultivos más eficientes en el uso del agua y el control de las malezas que compiten por el agua en los cultivos.

Un ejemplo de esto es la sectorización de los cultivos, de este modo las plantas que necesitan menos frecuencia de riego se colocarán en un sector con menor aporte del líquido vital.

Otras estrategias para optimizar el uso del agua

Cambiar del sistema de riego superficial a sistemas de presión, aspersión o por goteo localizado.

Reducir las pérdidas durante la conducción por evaporación del agua. Esto se logra mediante el rediseño de los canales, el mantenimiento de tuberías y el revestimiento de las mismas.

La reparación de redes y tuberías es el procedimiento de ahorro de agua económicamente más ventajoso.

El mejoramiento de la operación de los sistemas de distribución de agua para riego implica un mayor coste, sin embargo es bastante efectivo.

Construcción de reservorios para sectores de riego, esta medida consiste en la creación de estanques, pozos o reservas subterráneas que permitan incrementar la disponibilidad del agua.

Promover el reciclaje y reutilización del agua mediante el aprovechamiento del agua de lluvia.

Tipos de agua para el cultivo

Al maximizar el aprovechamiento del agua para cultivo se pueden considerar utilizar aguas de diversa calidad como:

  • Aguas salinas usadas en forma continua o alternada con aguas de buena calidad.

  • Aguas servidas tratadas.

  • Efluentes agroindustriales e industriales, tratados.

  • Aguas de mar en forma continua o alternada con aguas de buena calidad.

  • Aguas de drenaje reusadas provenientes de áreas regadas.

El uso de este tipo de aguas requiere la consideración de la sodicidad y la salinidad de las mismas, ya que elevadas concentraciones de iones se depositan en los suelos e incrementa la presión osmótica del agua del suelo.

Este efecto impide el aprovechamiento del agua por parte de las raíces y se genera además un desbalance nutricional, provocando toxicidad y deficiencias en las plantas, traduciéndose en disminución del rendimiento y la productividad.

Por ello, este tipo de estrategia debe ser utilizada con cautela. De otra manera, no se estaría generando un ahorro de recursos; más bien, se terminará afectando la productividad de los suelos.

Innovando en la optimización en el uso del agua, una mirada al futuro

Aún queda mucho camino por delante en la optimización en el uso de agua para la agricultura. Los avances tecnológicos han posibilitado la puesta en marcha de técnicas que en otros momento habrían parecido imposible.

Entre los métodos más resaltante podemos mencionar los enfocados en la manipulación genética de las plantas y el uso de sistemas satelitales.

Eficiencia de las plantas para utilizar el agua

La productividad del agua depende de la eficiencia con que las plantas utilizan este líquidos vital, bien sea durante la absorción, metabolización, evaporación y transpiración.

En los últimos años se han venido realizando notables mejoras en la eficiencia de las plantas gracias al desarrollo de variables genéticas capaces de tolerar el aporte de poca agua.

También se han desarrolla técnicas de biorremediación bacteriana y tratamiento de aguas residuales para la limpieza del agua y la eliminación de hidrocarburos y metales pesados, así como el desarrollo de plantas tolerantes al agua salada.

Innovación en el suministro de agua a los cultivos

Esta nueva tecnología busca incrementar el uso eficiente del agua con la agricultura de precisión.

Para ello, se utilizan sistemas computarizados que, con el apoyo de sistemas satelitales de medición, permite el suministro de agua y otros insumos a las plantas en el momento oportuno.

Con estos métodos también se busca disminuir la infiltración, el escurrimiento de agua con corriente en los suelos y el desplazamiento de arcilla, de sales, de hierro y de humus arrastrados por el curso del agua, minimizando la contaminación del agua y la salinización de los suelos.

La desventaja de este sistema es que es costoso para los pequeños agricultores, por lo que por ahora se necesita hacerla más accesible.

La importancia del agua para la agricultura

El éxito de la optimización en el uso del agua para la agricultura, como una actividad compatible con el medio ambiente, depende de múltiples factores.

De los factores principales, resalta la participación de usuarios conscientes de la importancia del agua para la agricultura. En ese orden de ideas, la gestión comunitaria del recurso hídrico debe propiciar el desarrollo y mantenimiento de los cultivos y de la producción regional.

En consecuencia los agricultores podrán hacer uso de la información y lograr el manejo racional y eficiente de los medios de producción, específicamente el uso de un recurso tan básico para la vida como el agua.

Referencias

http://repositorio.iica.int/bitstream/11324/6148/1/BVE17109367e.pdf

https://www.chj.es/Descargas/ProyectosOPH/Consulta%20publica/PHC-2015-2021/ReferenciasBibliograficas/UsosdelAgua/MARM,2011c.Huella%20hidrica%20de%20Espana[1].pdf

https://scielo.conicyt.cl/pdf/idesia/2016nahead/aop3516.pdf

http://www.elaguapotable.com/El%20agua%20en%20Canarias.pdf

https://www.icia.es/icia/index.php?option=com_content&view=article&id=21&Itemid=37&lang=en